Sóller reivindica la sostenibilidad y el entorno con Energy

La energía, la ilusión y el compromiso con el medio ambiente llenaron este jueves el municipio de Sóller y gracias a la colaboración del Ajuntament con la celebración de una nueva edición de Energy Ariya Challenge, una actividad educativa y lúdica que ya ha recorrido varias localidades de Mallorca sembrando conciencia ambiental entre los más jóvenes. En esta ocasión, fueron más de 160 alumnos de 3º, 4º, 5º y 6º de Primaria quienes convirtieron el campo de fútbol municipal en una auténtica aula al aire libre. Los estudiantes procedían de cinco centros del municipio: Sant Vicenç de Paül, CEIP Ses Marjades, CEIP Pere Cerdà, Sagrats Cors y CEIP Es Fossaret. Juntos, vivieron una intensa jornada en la que la sostenibilidad, la eficiencia energética y el trabajo en equipo fueron los ejes centrales.

Las actividades arrancaron desde primera hora con juegos cooperativos, dinámicas de grupo y propuestas de aprendizaje activo. Como en cada edición del Energy Ariya Challenge, una de las pruebas más esperadas fue el reto del pedaleo energético: bicicletas estáticas conectadas a generadores que transforman el esfuerzo físico en electricidad real. Las pantallas mostraban en tiempo real cuántos vatios iban generando los participantes, así como los dispositivos que se podrían alimentar con esa energía: desde tablets hasta portátiles. Pedalada a pedalada, los alumnos no solo sudaban la camiseta, sino que también aprendían de forma directa cómo funciona la energía limpia.

Otro de los momentos destacados fue la actividad de relevos por equipos, donde los estudiantes debían clasificar correctamente distintos residuos —como envases, restos orgánicos, papel y plásticos— en sus respectivos cubos de reciclaje. Una carrera divertida que fomentó el reciclaje consciente y el compañerismo. La creatividad también tuvo su espacio con el taller de carteles y eslóganes sostenibles, cuyos trabajos más destacados competirán para convertirse en la imagen oficial del Energy Challenge 2026 del municipio. Al final de la edición, serán los propios participantes quienes voten el diseño ganador, en un ejercicio de democracia participativa.

Sin embargo, si hubo una actividad que captó especialmente la atención del alumnado fue la un vídeo educativo sobre movilidad sostenible. La intervención no solo fue didáctica, clara y cercana, sino que llegó acompañada de un gesto simbólico y coherente: las frutas y las plantas que se dan a los alumnos llegaron a Sóller en un vehículo 100% eléctrico de la marca, demostrando con el ejemplo que otra forma de desplazarse es posible. Durante el vídeo se abordaron temas como la reducción de emisiones, el ahorro energético y los beneficios de apostar por una movilidad respetuosa con el entorno, despertando el interés y las preguntas de muchos niños y niñas.

La implicación de las autoridades locales también fue notable. El alcalde de Sóller, Miquel Nadal, no dudó en sumarse a la actividad subiendo a una de las bicicletas estáticas, acompañado por un profesor y el delegado del Port y regidor de Participació Ciutadana y Transparència, Biel Barceló. El gesto fue muy aplaudido por los escolares, que vieron cómo sus representantes también se involucran directamente en este tipo de iniciativas. Más tarde, Nadal hizo entrega oficial del cartel de ‘Reto superado’ a todos los participantes y aprovechó el momento para anunciar que próximamente se pondrá en marcha en el municipio una prueba piloto de recogida selectiva puerta a puerta. «Tenemos que dejar un mundo mejor a nuestros descendientes», afirmó con convicción, y añadió que «es muy importante concienciar a los más pequeños, porque muchas veces son ellos quienes nos trasladan propuestas sostenibles a los adultos».

El calor no dio tregua durante la mañana, pero la organización había previsto una merienda saludable para refrescar y reponer fuerzas. Sandía y melón de temporada hicieron las delicias de los niños, que agradecieron poder hidratarse y disfrutar de un descanso a la sombra. Como colofón a la jornada, cada alumno recibió una planta —puerros, apios o tomateras— como símbolo del compromiso adquirido. En el caso del CEIP Ses Marjades, estas plantas tienen un destino muy especial: se integrarán en el huerto escolar del centro, un espacio que fomenta el contacto con la tierra y los ciclos naturales desde la práctica directa.

La jornada fue posible gracias a la colaboración entre el Ajuntament de Sóller, la Conselleria d’Empresa, Ocupació i Energia, y empresas implicadas como Nissan, Cash & Carry Rotger, Saica, Agromart, Can Juanito, Motorisa y TBC. Energy Ariya Challenge continúa así su recorrido por más de 20 municipios mallorquines para llegar a más de 2.000 alumnos. Esta semana se visitarán los últimos pueblos de este curso. Una iniciativa que demuestra que, a través del juego, la participación activa y el ejemplo, es posible sembrar una semilla de conciencia ecológica en las nuevas generaciones. Y en Sóller, esa semilla ha empezado a crecer con fuerza.