Biel Coll y Pau Queralt son los apicultores y propietarios de Mel Vici, donde comercializan productos como la miel o el polen fresco.
Mel Vici, es una empresa creada por Pau Queralt y Biel Coll, dedicada a la cría de abejas y a sus productos: la miel, el própolis y el polen fresco. Tras un importante y gran periodo de formación, ambos jóvenes se embarcaron en dar forma a su sueño de producir miel mallorquina y repoblar los campos con abejas.
Los inicios, sobre todo para conseguir abejas, no fueron fáciles, pero desde 2014 Mel Vici es una realidad asentada en el sector y que da pie a la creación de nuevas explotaciones apícolas porque para aquellas personas interesadas, Queralt y Coll también ofrecen asesoramiento para emprender asentamientos apícolas.
La diversificación de productos ha sido su estrategia desde el principio. Actualmente, la empresa produce miel, polen fresco, -que es considerando un súper alimento con notables beneficios para la salud a nivel nutricional gracias a sus 22 aminoácidos-; y própolis -poco comercializado en la Isla) aquí-. Además venden colmenas y se encargan del mantenimiento de colonias de abejas de clientes que las tienen.
Ambos apicultores aseguran que Mallorca es un buen lugar donde criar colonias de abejas por las buenas temperaturas casi todo el año, aunque la falta de lluvias es un problema para las abejas, porque al llover poco hay menos polen y durante menos tiempo, lo que reduce los recursos de las abejas y aumenta su trabajo en poco tiempo. Por su puesto, destacan el papel fundamental como insectos polinizadores que son las abejas y su alarmante reducción en número en todo el mundo. Sin su función, plantas y árboles, entre otros, no progresan; además hay que añadir el cambio climático o las especies invasoras a su disminución de ejemplares.
Mel Vici también se preocupa por mejorar su compromiso con la sostenibilidad y para ello, este año han instalado unas 30 colmenas de abejas en una finca ecológica, con ello, ahora han conseguido que una de sus mieles cuente con certificación ecológica. Y no es que hasta ahora su miel no fuera de producción ecológica, ni mucho menos, pero para poder recibir la certificación, además de un proceso de cultivo determinado que cumpla unas características concretas, la finca donde se produce dicha miel también debe cumplir unos requisitos que hasta ahora no habían podido conseguir. Estos son: instalar a las abejas en fincas declaradas como ecológicas, y han de ser de grandes dimensiones, ya que deben abarcar el radio que ocupa la propia abeja que está en torno a los 3 kilómetros. Ahora, con una finca de esta descripción, su miel de siempre, con el sabor auténtico de siempre, está además certificada como ecológica.
Mel Vici también ha querido este año, volver a comprometerse con eMallorca Experience como iniciativa global y transversal sobre la sostenibilidad en Mallorca, para fomentar, desde su labor empresarial, el desarrollo sostenible y el cuidado al medio ambiente, así como, apoyar también la economía circular.